Henok Goitom en el último encuentro disputado por el equipo pucelano anotó el gol del empate ante el Sevilla y en la celebración cuando volvía a terreno pucelano se levantó la camiseta para enseñar un número 36 que llevaba anotado en una camiseta interior, todos nos preguntábamos que significado tenía ese número y en la edición digital del Norte de Castilla de hoy Arturo Posada, ex jefe de prensa del equipo blanquivioleta, lo explica tras una conversación con el delantero sueco.

Si por algo se caracteriza Goitom es por el gran amor y cariño que tiene hacía las tierras que le vieron nacer, el delantero es natural de Solna, aunque fue criado en el suburbio de Husby, donde la gran mayoría de la población era de origen extranjero, el propio jugador apunta, “el 98% de la población que residíamos allí éramos de otro país”, siendo él un buen ejemplo porque sus padres eran naturales de Eritrea, pequeño país al noreste de África, Henok nunca ha renegado de sus orígenes y la celebración de último gol quiere hacer valer una promesa que tenía con unos amigos de su lugar natal, para todos los jóvenes de allí el fútbol era y es una forma de divertirse y de olvidarse el mal momento que viven, todos, alrededor de 40, cómo bien recuerda el jugador, acudían al mismo parque tarde tras tarde, el campo de Trean que traducido al español es tres o tercio, mientras que la hora en la que se reunían para hacer lo que más les gustaba eran las seis de la tarde, siempre, pasase lo que pasase, todos lo jóvenes acudían al campo de Trean para disfrutar de una serie de partidos de fútbol, de ahí unieron cifras e hicieron el dígito 36 su número de entendimiento y unión

«Si alguno de nosotros llega lejos, si uno de los nuestros triunfa, llevará en el dorsal de su camiseta el número 36 como recuerdo de todos los que nos quedamos aquí y de lo que pasamos juntos» estas fueron las palabras que se dijeron los amigos del campo de Trean el día que se separaron y Henok Goitom no las olvidó, su intención cuando llegó a España, en concreto al Ciudad de Murcia, procedente del Udinese era portar dicho número 36 a su espalda y así domingo tras domingo, partido tras partido, hacer un pequeño homenaje a los compañeros de infancia, pero las normas españolas prohíben llevar un dorsal superior al 25 si se es jugador de la primera plantilla por lo que la intención del sueco quedó en eso, por ello el sábado 21 de marzo y siendo consciente de que vive unos de sus mejores momentos decidió pintarse en su ya característica camiseta de manga larga interior el número 36 para mostrarlo a las cámaras en el caso de meter gol, ese momento llegó a los 21 minutos de juego cuando tras un centro magnífico de su compañero Canobbio anotaba su noveno gol en la temporada, Goitom en la celebración no tardó en levantarse la camiseta para mostrar a toda España dicho número de manera orgullosa aprovechando que el partido era televisado de manera gratuita a todo el país y la audiencia sería mayor, tras la acción lo que más feliz hace a Goitom es que el gesto llegó a todo su país y todos han sido conscientes de que no ha faltado a su palabra y que día tras día se acuerda orgulloso de sus raíces.