Es triste que un jugador que ha dado tanto al Real Valladolid vaya a salir del José Zorrilla por la puerta de atrás, pero así es el fútbol. Un deporte donde se recuerda el final y no todo lo realizado. Después de que Jonathan Sesma hiciera en sus dos primeras campañas de blanquivioleta dos temporadas magníficas el jugador canario será recordado por el bajo nivel exhibido esta temporada y por los problemas que no le hicieron renovar.

Nada más conseguir el ascenso a Primera división, Mendilibar pidió a Carlos Suárez el fichaje de Jonathan Sesma. El entrenador vasco creía que con el canario en la banda izquierda el equipo ganaba en profundidad y en gol. Tras unas duras negociaciones con el Cádiz, Sesma consiguió recalar en el José Zorrilla a cambio de más de un millón de euros. Su primera temporada fue magnífica, pero no mejor que la segunda donde se convirtió, tan sólo por detrás de Goitom, en el máximo goleador del equipo. Esta temporada, en cambio, el jugador ha vivido un calvario. Primero tuvo una lesión fortuita en un entrenamiento, después no llegó a un acuerdo con el club y como todo futbolista se buscó el futuro en otro club, pero siempre cumpliendo con la ley. Hay un sector de la afición que no entiende la actitud del ‘19’, porque al igual que con Pedro León, hace menos de un año, se quería una explicación que no llegó, o no se dejó dar.

NOTA DE LA TEMPORADA: SUSPENSO

¿FUTURO? Lo único que hay que aclarar del futuro de Jonathan Sesma es cual será su equipo a partir del próximo 30 de junio. Todo hace indicar que será el Betis, con quien parece tener un precontrato, pero la lucha de estos por el ascenso le deja las puertas del Málaga y otros equipos de Primera abiertas de par en par.