Algunos sectores de Valladolid eran muy pesimistas por el partido que se jugaba en Murcia en relación a la revolución que Mendilibar llevó a cabo para este citado partido, si sorprendió la no convocatoria de Pedro López y Rafa no fue menos llamativa la no puesta en el once de dos jugadores muy destacados en el once pucelano, Sisi y Víctor, tal revolución dió el resultado que Mendilibar y todos los pucelanos queríamos, tres puntos en casa del Real Murcia que dan oxígeno, que terminaran con cuatro jornadas sin ganar y que alejan a un rival directo a ocho puntos de distancia.

El Real Valladolid quería ser dueño y señor del movimiento del balón por lo que se colocó en el centro del campo con tres hombres, Vivar Dorado más adelantado haciendo las funciones de media-punta pero más defensivo que con Víctor en el terreno de juego, conforme pasaban los minutos esta idea se hizo patente porque los de Mendilibar fueron quienes lideraron el partido desde el centro del campo con unos Borja y Álvaro Rubio inconmensurables que recordaron a la gran pareja del año pasado.
El partido se puede resumir en torno al 13º gol de Joseba Llorente pero entonces se destacaría solo a un hombre y ayer fueron los 14 jugadores que saltaron al campo quienes dieron todo por los necesarios y vitales tres puntos, desde la portería hasta el propio delantero vasco todos hicieron el partido que se les había marcado.

31 puntos tiene el Real Valladolid, los cuales le llevan a la décima posición en la tabla, tres victorias en lo que queda de temporada y algún empate sería suficiente para que se consiguiera el objetivo pero sin ninguna duda el objetivo del cuerpo técnico no será simplemente conseguir esos puntos sino que conseguir la misma brillantez del año pasado y eso pasa por crecer partido a partido.