El mes de Nauzet Alemán. Así de claro y de conciso se podría calificar el mes de noviembre y eso que el jugador no lo empezó como titular. En el primero de los encuentros del décimo mes del 2009 el titular en banda derecha fue Sisi, pero una patada de Muniaín, provocó la lesión del albaceteño. Dolor que aún no ha remitido y que tras casi tres meses siguen dejando al jugador en la enfermería.
El mes comenzó con el empate del equipo blanquivioleta en casa ante el Athletic de Bilbao. En dicho partido loco, el equipo vasco comenzó poniéndose por delante en el marcador, posteriormente el equipo de Mendilibar dio la vuelta al marcador para terminar sucumbiendo al empate. La imagen, tan necesario tras el fracaso de Mallorca, fue buena. Mejoró mucho, de ahí que el equipo volviese a puntuar, y a su vez, estrenase su casillero de puntos cosechados en casa. Tras este encuentro, la semana estuvo envuelta en la polémica. Una acción fortuita de Nivaldo con Llorente, dejaba a este último inconsciente en el suelo. Algunos medios nacionales afrontaron el tema subjetivamente y dejando al jugador brasileño como culpable. El propio jugador, tuvo que salir en rueda de prensa y dar su versión de los hechos, unas palabras que no habían interesado a determinados medios.

Tras toda la polémica se volvía a los terrenos de juego. Y con Nivaldo. El comité de competición decidió quitarle una de las amarillas que vio en el encuentro ante el Bilbao. De esta manera el central pudo debutar en el estadio Santiago Bernabéu.
En el encuentro en Chamartín, ante el proyecto de Florentino Pérez, el Pucela plantó cara y dio varios sustos al equipo merengue. Finalmente la mayor pegada blanca y la mala suerte blanquivioleta dejaron el resultado en un 4-2 para los madridistas. Un buen sabor de boca que dejaba un resumen centrado en dos personas: Nauzet y Diego Costa. El primero, el canario, demostró con la ejecución de una falta magistral, que el equipo no iba a añorar la falta de Pedro León. Que con él sobre el terreno de juego se ganaba en balón parado. El segundo, el brasileño, dio una clase magistral de fútbol en la tarde madrileña. Aquella tarde-noche de sábado, el delantero dio un recital en una de las catedrales del fútbol. Demostró velocidad, zancada, disparo y desparpajo. Presentó su candidatura a referencia del equipo y provocó que el Atlético de Madrid tuviera que hacer oficial su intención de repescarle a final de la temporada.
Fue una derrota pero con unas magnificas sensaciones. Impresiones que había que demostrar en el siguiente partido, ya en casa.

Se tenían que demostrar esas mejorías y se demostraron de manera inmejorable. 4-0 ante un equipo que venía con un record de imbatilidad, el Deportivo de la Coruña. Un partido perfecto que tuvo en Nauzet Alemán, otra vez, y en Justo Villar a los protagonistas. El primero porque anotaba dos goles y en la sustitución se llevaba la ovación del público; el segundo, porque el cuerpo técnico decidía darle la titularidad. Tras haber comenzado Jacobo como dueño de la portería, Villar se colocaba bajo palos y dejaba la portería a cero seis jornadas después.
En un momento pletórico para el equipo se tuvo que afrontar la ida de los dieciseisavos de final de la Copa del Rey. En el José Zorrilla se citaba el Mallorca, y tras el partido del mes de septiembre se quería dar un cambio a la situación, pese a ser un “partido” de 180 minutos. El Real Valladolid ganó por la mínima para afrontar el partido de vuelta en un campo gafe con una renta escasa para lo merecido.

El personaje del mes: Nauzet AlemánDesde su llegada al equipo no había vivido una buena experiencia. Se vio afectado por la rabieta de Pedro León y posteriormente relegado al banquillo por la llegada de Sisi. Pese a esto, y a la necesidad de tiempo para aclimatarse a la ciudad, Nauzet trabajó día tras día y se ganó la confianza de Mendilibar para el partido ante el Real Madrid. Encuentro en que el canario creó su carta de presentación. Su gol de falta directa en el mejor estadio posible, dio la vuelta al mundo y provocó que desde aquel momento se conozca al jugador como “el del golazo a Casillas”. Tras este encuentro llegó el del Deportivo de la Coruña donde el extremo del equipo se convirtió con sus dos tantos en el Pichichi del equipo. Casi nada para ser debutante en Primera.