‘El Peternac’ (Premio al jugador con el mayor acierto de cara a gol): Que un defensa anote un gol siempre es noticia y más si este es el primero que anota con su nuevo equipo. Por esto, que Marc Valiente fuera quien marcase en el partido del Ruiz de Lopera le hace merecedor de ser el futbolista con mayor acierto de cara a la puerta que defendía Goitía. También es cierto que la pareja de centrales de la que goza esta temporada el Real Valladolid tiene muchas papeletas de ocupar este puesto en esta campaña pues ambos, sin olvidar a un tercero, Jordi Figueras, poseen un gran juego aéreo.

‘El Chema’ (Premio al jugador más luchador del partido): Los dos goles de la pasada jornada dejaban a Javi Guerra con un promedio de un gol por partido. Esta bonita cifra fue rota en el encuentro ante el Betis porque el malagueño no consiguió su cuarta diana de la temporada. Pese a que el ‘9’ blanquivioleta no consiguió lo que más le demanda el aficionado, el jugador no paró de intentarlo; luchó sin descanso por batir al portero verdiblanco y para generar ocasiones de gol. Finalmente el Real Valladolid se marchó del estadio con la derrota pero con el convencimiento de haber encontrado un delantero luchador y de garantías.

‘El Caminero’ (Premio al jugador que dejó más destellos de calidad en el partido): Desde la marcha de José Luis Mendilibar, Álvaro Rubio estaba en entredicho para el aficionado blanquivioleta. El jugador riojano, el cual poseía gran relación con el entrenador vasco, sufrió una lesión que le mantuvo alejado toda la segunda vuelta del pasado campeonato. Pese a que algunos buscaban o pensaban en la jubilación, vía marcha, del medio centro, el futbolista ha vuelto con ganas y con la calidad que le caracteriza al mando de juego del Real Valladolid. El pase en profundidad que realiza a Javi Guerra en la segunda parte es, además de la demostración de que está de vuelta, la muestra de que en sus pies hay una calidad endiablada.

‘El Peña’ (Premio al jugador que muestra mayor dureza en el partido): Llevar dos expulsiones en tres partidos es un dato escalofriante que mancha, y mucho, el actual papel de Guilherme en el Real Valladolid. Es cierto que el lateral brasileño lleva un buen comienzo de temporada pero tan cierto como esto es verdad que dejar al equipo en inferioridad numérica dos partidos consecutivos y ambos fuera de casa, es algo que marca a un jugador. Y más si este viene con el currículo que al brasileño le colgaron en Almeria.