“Djukic da más confianza al futbolista”, afirmaba Kiko Femenía tras los primeros entrenamientos con el serbio. Estas palabras del joven extremo no eran propias. La voz del que puede ser futbolista del Fútbol Club Barcelona era el sentir del vestuario: con Miroslav Djukic, los futbolistas del Hércules tenían más confianza en sí mismos.

Puede ser que el serbio sea un principiante en los banquillos pero es un gran experto en esto del mundo del fútbol. Lleva sólo seis años como entrenador pero en este tiempo ha aprendido mucho. Ha aplicado los conocimientos adquiridos en sus casi 20 años de futbolista al ámbito de la preparación. Además, las vivencias que ha soportado en el banquillo le han enseñado lo que debe y lo que no debe hacer como entrenador.

Un debut a lo grande
Comenzó fuerte. Debutar entrenando una selección no es fácil. Esta primera aventura fue liderar el combinado sub-21 de su país, Serbia, y salió bien (subcampeón de Europa). El buen trabajo con los jóvenes pronto se vio recompensado con un puesto fijo en el Partizan de Belgrado. Poco más tarde, la marcha de Javier Clemente de Serbia le dejaba el puesto en bandeja. Los informes que el entrenador vasco dejó en la Federación serbia sobre él y el trabajo que había conseguido con el equipo albinegro, ayudaron mucho en su debut en la absoluta.

Djukic aprovechó esta opción hasta que tuvo una oferta más suculenta sobre la mesa. El Royal Excelsior Mouscron, de la liga belga, llamaba a su puerta para ofrecerle un trabajo diario. El ofrecimiento de liderar el proyecto de un equipo extranjero le atrajo pero no tuvo suerte. Los graves problemas económicos del club acabaron con el sueño del serbio y de un flamante grupo de trabajo que había creado con los ex valencianistas Amedeo Carboni y Juan Sánchez.

Regreso a España
Tras su fugaz paso por Bélgica, Djukic se asentó en España. Durante este tiempo, el objetivo del nuevo entrenador del Real Valladolid fue continuar con su labor de documentación y aprendizaje de distintos modelos de trabajo. Todo estaba encaminado a poder ponerlo en práctica en la ‘Liga BBVA’ algún día. Este sueño se cumplió y fue mucho antes de lo que esperaba. La consecución del objetivo fue el pasado 24 de marzo al ser contratado por el Hércules.

Su periplo en Alicante no fue todo lo fructífero que el propio entrenador quiso. El proyecto hacía aguas y Djukic no pudo tapar tanta hemorragia como había. Finalmente los nueve puntos obtenidos en los mismos partidos disputados no son lo más destacado de su periplo por Alicante. La opinión positiva de todos los estamentos del club herculano son los que han corrido a favor de la contratación del serbio no como entrenador, más bien como líder del nuevo proyecto blanquivioleta. Tres años le unen al club blanquivioleta. Tres temporadas para intentar hacer del club pucelano más grande.