Lo importante cuando se empieza un proyecto es tener claro que es eso, un proyecto. Los errores del pasado tienen que servir para mejorar el presente y un paso hacia atrás, como fue el descenso hace dos temporadas, tiene que servir para posteriormente dar dos hacía delante. El año pasado no aprendimos. Los jugadores, la directiva y la afición nos encorsetamos bajo el lema en el cual el fin justificaba los medios. Sólo se buscaba subir o subir, por las buenas o por las malas. Daba igual tanto el cómo, el quién y el por qué. Así no íbamos a ningún lado. Pan para hoy y hambre para mañana.

Ahora, desde arriba, el discurso ha cambiado. La era Suárez, como máximo accionista del club, ha comenzado con un guión diferente y una política distinta. Esto ha hecho que llegara al club un técnico como Djukic, firmando un proyecto de tres años, ¡Quién pudiera decir eso en estos tiempos de crisis!. Pero que nadie se equivoque, porque nada más lejos de la realidad, esto es fútbol y al final no solo con las buenas intenciones iniciales basta. Entran en juego una serie de variables que sí se pueden controlar, pero otras tantas que no. Por eso es tan bonito el fútbol.

Metidos en jaleo y ya iniciada la presente temporada no cabe la menor duda que el equipo va a sufrir cada punto que consiga como el que más. Solamente con el mayor sacrificio se podrá doblegar al rival, por cualquiera que sea. De eso nos tenemos que concienciar todos, tanto equipo como afición. Como ejemplos podemos poner muchos. El Murcia nos pintó la cara en Zorrilla, en Vigo se escaparon dos puntos sobre la hora y en Almería se ganó uno también en el añadido.

Mientras tanto, el equipo sigue su adaptación mutua, Djukic se acomoda a la plantilla y la plantilla se adapta al serbio. En esta dinámica el equipo está metido en la pomada y ciertamente, deja esencia de mejora con el tiempo, como el buen vino. Pero está claro que el técnico debe dar cuanto antes en el clavo con los nombres y el dibujo, para poder beber el vino a tiempo y que no se nos avinagre.

Artículo firmado por @JavierBarrocal