· Marcos ante la celebración de los azulones en el última visita (NorteCastilla) ·

Los últimos encuentros entre Real Valladolid y Getafe han tenido a la parte ofensiva blanquivioleta como protagonista. Sanciones, convocatorias internacionales, lesiones y hasta motivaciones extremas han marcados los duelos entre dos equipos con una nula historia previa. Tan sólo la cesión, y posterior venta, de Sergio Pachón en 2004 había reunido a Ángel Torres y Carlos Suárez en una cita en la que los puntas pucelanos copaban la información del encuentro.

Desde Henok Goitom hasta Alberto Bueno pasando por Fabián Canobbio, Kike López, Joseba Llorente o Vladimir Manchev son los nombres propios de una unión en los duelos entre madrileños y pucelanos que este fin de semana vivirá un nuevo capítulo con el famoso dilema entre Manucho y Javi Guerra.

El fijo Llorente 

Tras la dura negociación entre Ángel Torres y Carlos Suárez del verano de 2004 por los derechos de Pachón, ambos dirigentes no se verían las caras hasta el 6 de enero de 2008. Aquel día ambos equipos se enfrentaban por primera vez en la máxima categoría y el Pucela salía victorioso. El 0-3 de los pucelanos generaba seguridad en el equipo porque, entre otras cosas, la zona ofensiva no había sufrido variación. Joseba Llorente, fijo para Mendilibar, no perdía su posición, algo que no se puede decir en las dos siguientes visitas. Tanto en octubre de 2008 como en enero de 2010, el caos ofensivo se instaló en el vestuario visitante del Alfonso Pérez.

La primera locura ofensiva tuvo como protagonista a Kike López Delgado. El joven delantero del Real Valladolid Promesas disfrutó en Getafe de su única titularidad en la élite. El 26 de octubre de 2008, el salmantino dejó fuera de la convocatoria a los dos delanteros del primer equipo. Tanto Henok Goitom como Bartholomew Ogbeche no viajaban en lo que suponía una técnica de motivación del cuerpo técnico. El resultado no fue bueno para aquel partido, como tampoco lo fue la temporada siguiente.

Un año futbolístico después, y en concreto el 3 de enero de 2010, el caos en la zona de ataque del Real Valladolid se mantuvo. Esta vez no fue provocado por Mendilibar sino por las circunstancias. Con Diego Costa sancionado por ciclo de amonestaciones y con Manucho en Angola por la disputa de la Copa de África, la única solución era la de Alberto Bueno. El canterano madridista disfrutó en Getafe de su segunda titularidad en Primera, pero sin suerte. Pese a conseguir un gol totalmente legal, Teixeira Vitienes anuló el tanto de un Alberto Bueno que confesaba en la red social Twitter que espera poder conseguir allí “mi tercer tanto de la temporada”.

Oportunidad para Javi Guerra 

De conseguirlo, para Alberto Bueno sería el cuarto tanto de la temporada. Si por el contrario, anota Javi Guerra, sería su estreno esta temporada. Por los precedentes locos que existen en estos partidos y la motivación extra que puede sentir el futbolista, la oportunidad para el malagueño es muy buena. El domingo, el ‘9’ pucelano se volverá a cruzar con el entrenador que el ‘llevó’ al Real Valladolid. La gran temporada de Javi Guerra en el Levante de Luís García Plaza le abrió las puertas pucelanas.

Tras una campaña, y 29 goles después, Javi Guerra pudo haber salido del estadio José Zorrilla en 2011. El interés del Getafe y de García Plaza estuvo cerca de consumarse. Finalmente, las duras negociaciones entre presidentes dejaron al malagueño en Valladolid porque, ya se sabe, entre dos Torres y Suárez los pactos son duros y el pucelano no olvida la salida de la primera relación entre ambos, Valentín Sergio Pachón, primer delantero en convertir los Getafe – Real Valladolid en una locura ofensiva.

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