Con nueve goles y como uno de los jugadores más en forma del campeonato, las dudas sobre el contrato de Óscar aparecen. Asoman condiciones a su renovación ‘vitalicia’ 

“Inicialmente se firma un contrato de dos temporadas pero mientras juegue el 60% de los partidos que haya en competición, seguirá renovando mientras dure su vida profesional en activo”. Las palabras de Carlos Suárez sobre el contrato de Óscar González el 19 de julio de 2011 aclaraban el futuro del futbolista. Jugar para renovar y seguir jugando de blanquivioleta hasta que el propio jugador decidiera poner fin a su carrera profesional. 

Durante aquel mes de julio parecía que se cerraba la continuidad de Mágico de una forma vitalicia, pero no es así. Las cláusulas y la letra pequeña del contrato citan a jugador y club para una negociación en el próximo mes de junio. “Hay una renovación automática estipulada en el contrato, pero no es algo tan sencillo. Hay cosas que hablar y dependerá, claro, de lo que me ofrezca mi club”. Las palabras de Óscar el pasado domingo en ‘El periódico de Aragón’ muestran la necesidad de una reunión y unas condiciones para que el salmantino siga en el club. A los “requisitos deportivos” a los que la web pucelana hacía mención el día de su renovación hay que añadir más. Óscar González quiere conocer los ofrecimientos para firmar uno de sus últimos contratos como futbolista profesional. 

Ganas de continuar 

Si durante aquel verano de 2011 las ganas de propio futbolista fueron vitales para que se firmara la renovación, este verano pasará lo mismo. Óscar dará preferencia al Real Valladolid. Por la cláusula que ofrece la renovación tras el 60% de los partidos disputados y por amor por el club, Óscar no dudará en escuchar primero la oferta de Carlos Suárez. Pese a interés desde Inglaterra y de equipos españoles punteros como el Sevilla, el ‘10’ pucelano quiere seguir en el estadio José Zorrilla. 

“Mi objetivo es continuar y sé que el Valladolid quiere que siga”, las palabras del jugador al diario aragonés dejan claro cuáles son sus intenciones pero con unas condiciones que el club le debe mostrar al mejor futbolista de su plantilla. El mismo jugador que hace dos temporadas decidió perder dinero para volver a vestir 'su' camiseta y devolver al Real Valladolid a la élite del fútbol español se merece lo mejor.  Se lo ha ganado.

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