Iturralde, Pamplona (familia del colegiado pamplonica y rojilla) y el Real Valladolid. Todos los ingredientes hacían pensar que el vasco sería uno de los protagonistas, pero finalmente, y por el bien del fútbol, Iturralde González pasó inadvertido.

En Valladolid aún nos acordamos de la eliminación de Copa de la temporada 2008, su no concesión de un claro penalti a Joseba Llorente cuando restaban dos minutos para el final de una eliminatoria, o el clamoroso penalti a Marquitos en el pasado Real Valladolid – Atlético de Madrid han hecho mella en el pensamiento del aficionado blanquivoleta sobre el veterano colegiado. Estos dos recuerdos, de otros tantos, hicieron mella para afrontar el partido. La afición llegada desde distintos puntos, pero que apoyaba al equipo blanquivioleta en su totalidad, se acordaban de la familia de Iturralde González cada vez que este tomaba una decisión en contra del bien del equipo de Onésimo, el cual también contribuyó en esta presión. Según el Norte de Castilla antes del encuentro el entrenador vallisoletano y el colegiado mantuvieron una conversación, en la que se podía apreciar a un Onésimo enfadado por el trato recibido por el primer equipo blanquivioleta por el propio Iturralde o por sus compañeros.