Uno de los titulares que mejor vendrían al encuentro que enfrentará al Celta de Vigo y al Real Valladolid es “el cruce de rachas muy distintas”. El equipo de Abel Resino está en el mejor momento de la temporada mientras que el Celta de Vigo afronta el duelo en su peor racha. Viendo esta situación uno se pregunta cómo un equipo que desplegó un gran fútbol en la primera vuelta y que terminó la primera parte de la temporada en segundo puesto puede encadenar siete partidos consecutivos sin ganar. La solución es fácil: el Celta de Vigo no tiene plantilla para competir en los puestos altos de la clasificación. El equipo de Paco Herrera dispone de un gran once, con David Rodríguez Trashorras y Quique de Lucas como líderes, pero no de unos suplentes que acompañen a los 14 o 15 futbolistas ‘titulares’ que el Celta tiene y que se pueden considerar de alto nivel.

El conjunto vigués es una institución que desde hace años está muy golpeada por la crisis económica. Hace un par de temporadas, con el actual secretario técnico del Real Valladolid, ‘Chuti’ Molina, en las oficinas gallegas, el equipo afrontó una remodelación. Se apostó por gente joven, generalmente del filial, para hacer la base del equipo. Los retoques vendrían con futbolistas veteranos que llegaran a coste cero. La idea pasaba por un proyecto a largo plazo. Por ello, en estos momentos el plantel del que dispone Paco Herrera pierde mucho cuando las lesiones o sanciones les quitan a dos o tres jugadores. Los gallegos están en fase de crecimiento y ahora se encuentran en un punto intermedio.

El escaso dinero genera confianza

Con las nulas posibilidades de ir al mercado invernal Paco Herrera tenía que dosificar a sus estrellas y extender sobre el calendario los puntos obtenidos. Al equipo gallego se le iba a hacer larga la temporada por la falta de profundidad de banquillo, y así está siendo. Lo que en el mes de noviembre parecía un camino de rosas se ha convertida en una dura escalada. De todas formas a Paco Herrera no le pilló nada de todo esto por sorpresa. El ex entrenador de Villarreal B o del Albacete sabía por que club fichaba y las limitaciones que tenía. Pese a ello era una buena opción porque en el mes de agosto la obligación de ascender no existía. Todo lo que se obtuviera sería positivo.

Hablamos de que el Celta de Vigo pierde mucho enteros cuando determinados jugadores salen del once inicial. Se habla de algunos pero no de todos. En la portería gallega está el ‘Zamora’ de la categoría. El ex atlético Falcón ostenta en estos momentos el trofeo del portero menos goleado de la categoría. El ex blanquivioleta Fabricio Agosto le sigue muy de cerca, y este fin de semana quizás le supere. Las informaciones que salen de Galicia apuntan a que el staff técnico ha perdido la confianza en Falcón.

Hace dos semanas el cancerbero fue expulsado por agredir a un rival. Su sustituto, Yoel, realizó un gran partido ante el Real Betis y Paco Herrera y los suyos están meditando la posibilidad de dar la alternativa al canterazo celtita. En la portería hay sustituto y posibilidades. En otras posiciones los recambios no son de tanto nivel.

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