El Real Valladolid se impone al Xerez gracias a los tantos de Sisi y Nauzet Alemán. La entrada del canario en el minuto 72 vital para romper el empate andaluz

Nauzet no está pasando un buen momento. El canario recibía al Xerez tras dos partidos seguidos sin jugar en un duro golpe a un autoestima muy tocada ya por el estado de salud de su padre. El ‘7’ necesitaba un partido para reivindicarse y demostrar que nada puede con él y que su nivel futbolístico está por encima de la categoría. Esta vez Djukic sí le daba la oportunidad al entregarle 21 minutos de partido. 'Nau' no necesitaba tantos y con cinco se bastaba.

Con la victoria ante el Xerez el Pucela obtiene algo más que tres puntos. Al imponerse a los andaluces los de Djukic consiguen un fichaje de entretiempo. La acción del segundo gol del Pucela demuestra el regreso de Nauzet Alemán tras dos jornadas desaparecido, mucho tiempo sin uno de los futbolistas con mayor calidad de la categoría.

Los González siguen a lo suyo
Antes del partido se podía afirma que Nauzet Alemán no estaba en un buen momento. Es obvio que el ‘7’ no es el de otras veces, como también es cierto que su ausencia se nota menos de lo normal gracias al estado físico de Óscar y Sisinio González. ‘Los González’ llevaban de cráneo a la defensa de Merino en un encuentro que manejaban a su antojo. De un tiempo a esta parte es automático. El esférico llega a los pies de Óscar, Sisi se frota las manos y la defensa rival tiembla. Entre los dos destruyen una defensa y la del Xerez no ha sido menos.

En el minuto 43, cuando el gran juego inicial del Real Valladolid se diluía, ambos futbolistas se aliaban y con dos toques levantaban a la grada para poner el 1-0. Pase al primer toque del ‘10’ que el ‘21’ eleva sobre un Toni Doblas muy inseguro. El gol, merecido por juego de unos y de otros, remarcaba, una vez más, el nivel físico ‘Los González'.

Nauzet alivia a Rueda
Los segundos 45 minutos empezaron con un dominio aún más aplastante del Real Valladolid. Los de Djukic jugaban su fútbol pero se diluían como un azucarillo con el paso de los minutos. El Xerez robaba la tostada a los locales como José Mari se la comía a Jesús Rueda en la jugada del empate en el minuto 70. El central mostraba su inocencia en una acción que el veterano delantero llevaba a su terreno y los andaluces no desaprovechaban desde los once metros.

Con el gol del empate Djukic levantaba el 'castigo' a Nauzet para que el canario decantara el partido del lado blanquivioleta. Su jugada y posterior gol de penalti dan tres puntos al Pucela, una bocanada de aire fresco al jugador y mucha, pero que mucha fuerza al padre del futbolista para quien el ‘7’ y todos los pucelanos dedican esta victoria. Su mejora repercutirá en el juego del canario y, por consiguiente, en el del equipo, el objetivo de todos.

Imagen de 'Norte de Castilla'