Perplejidad, estupor, incredulidad. Son solo alguna de las palabras que pasaron por la cabeza de todos, cuando Saúl y un rechace, desencadenaron la igualada en el marcador. Faltaban seis minutos para el final del partido, en un día muy especial, pero que se volvía en contra.

Pucela tiñó Alcorcón de blanquivioleta durante todo el día. Apoyó al equipo incluso sin quererlo, cuando uno de los autobuses, de casualidad, se encontró con el equipo a la entrada del hotel. Los aficionados que en ese autocar se encontraban, decidieron en su mayoría quedarse a darle la bienvenida y las primeras muestras de cariño a los jugadores. Era sólo el principio de una jornada donde todo Valladolid tenía puesta la ilusión de estar un poco más cerca del ascenso. Un poco más cerca de primera. Un poco más cerca del objetivo marcado.

Dos horas antes del partido, el equipo volvió a darse un baño de multitudes. Más de doscientos seguidores ‘asaltaron’ el hotel donde estaban los hombres de Djukic, para darles ese plus anímico que pudiera influir en el terreno de juego.

Al final no pudo ser. No nos llevamos los tres puntos de Alcorcón y las posibilidades de ascenso directo quedan reducidas a la mínima expresión. Tan mínima, como la improbabilidad de ver a Celta y Córdoba romper un pacto ya prácticamente firmado y sellado.

Pero esto no ha acabado, esto sigue adelante y queda el camino del play off y la ventaja de ser los primeros clasificados para el mismo. ¿Aún hace falta algún motivo más para creer en un equipo que te ha hecho disfrutar tanto este año? No seré yo quien tenga que convencer a nadie de esto. Para eso la plantilla ha estado toda la temporada desatando ilusión, juego y compromiso. Acordaros del gol de Óscar ante Las Palmas o de las remontadas culminadas en casa ante Numancia y en Barcelona en el Mini Estadi. También recordad las lecciones de fútbol de tantos partidos y la filosofía que ha demostrado este Real Valladolid.

Pero sobretodo, no olvidéis que este equipo ilusiona y es capaz de mover a toda la gente que se desplazó a Alcorcón para dar el ‘do de pecho’.

¿Todavía no le tienes fe al equipo? ¿Todavía no te has levantado?

Djukic aquí tienes otra garganta, conmigo puedes contar.

Artículo firmado por @JavierBarrocal