El pasado fin de semana en el encuentro entre el Real Valladolid y el Athletic de Bilbao se produjo un hecho que no me gustó en absoluto por parte de la afición pucelana, y es que tras haber marcado Aduriz el primer tanto visitante, fallo de Butelle como de la propia defensa, el público que se dió cita en el feudo pucelano comenzó a pitar al portero francés cada vez que este tocaba el balón, y mi pregunta es: ¿con que objetivo se le pitaba? La única respuesta posible es que la intención de la grada era poner nervioso al portero y con ello conseguir que disminuyera su concentración.
El propio portero ha pedido disculpas a través de la página web y para mi son innecesarias, un portero tiene días mejores y peores, rachas buenas y menos buenas, pero eso de pitar a tu propio portero en tu propia casa no lo había visto nunca y me parece de lo más triste, aunque esta sea mi afición.

El objetivo de la grada pucelana es que Mendilibar se cargue de un plumazo el trabajo del verano eliminando de sus planes a los dos porteros de la primera plantilla: el citado Butelle y el veterano Alberto con el fin de que quién defienda la portería pucelana sea el joven canterano Sergio Asenjo.

Cada vez que en distintos foros pucelanos veo estas palabras no dejo de sorprenderme, porque si, Sergio ha demostrado a todos que es un portero de garantías en los distintos mundiales que ha jugado con las categorías inferiores de la Selección y en la eliminatoria de Copa del año pasado contra el Nastic de Tarragona pero la experiencia es un grado y él no la tiene por su corta edad y la posición de portero es una de las más castigadas por las críticas.

Creo que es el momento de que se deje trabajar a todo el mundo, Butelle o Alberto sigan defendiendo la portería pucelana esta temporada sin ninguna presión añadida y que Sergio al que le espera un gran futuro dispute partidos en 2ªB con el Real Valladolid Promesas y que dispute minutos como ya dijo el en la pretemporada, porque lo que está claro es que el entrenador pucelano, José Luis Mendilibar, está contento con su trabajo y cuenta con él.