Si ayer en estas mismas líneas se hablaba de que el overbooking existente en el centro del campo del Real Valladolid era un bendito problema para Miroslav Djukic, Héctor Font ha querido reducir esa alegría. El castellonense ha puesto hoy fin a su periplo en el Real Valladolid al obtener la carta de libertad.

Héctor Font llegó al estadio José Zorrilla hace dos veranos (clic aquí para artículo de presentación). Lo hacía avalado por una técnica individual depurada y una polivalencia en puestos de ataque (click aquí para artículo) que favorecía mucho la profundidad de banquillo del equipo que entrenaba José Luís Mendilibar. Las cosas ese primer año no salieron bien ni en el capítulo individual ni en el general. El equipo descendió y Héctor tan sólo jugó diez partidos (siete con Mendilibar, dos con Onésimo y uno con Clemente).

Viendo que el castellonense no iba a contar con minutos en el proyecto que la pasada temporada emprendió el Real Valladolid con Antonio Gómez, salió cedido al Xerez. Allí contó con oportunidades y minutos. En Chapín se convirtió en un futbolista importante cumpliendo las premisas y esperanzas que llevaron al Real Valladolid a ficharlo un año antes.

Pese a la buena temporada en Jerez de la Frontera el futbolista no ha entrado en la cabeza de Miroslav Djukic. Sus dolencias en el brazo no le han dejado entrenar con el equipo y el destino del futbolista estaba cantado que no sería en Valladolid. Ahora con la carta de libertad bajo el brazo, el talentoso futbolista podrá demostrar que el camino lleno de pena que transitó en Valladolid fue sólo una mancha en su carrera.